UN FOTOGRAFO EN MANTA

 UN FOTOGRAFO EN MANTA

Entre el 7 y el 14 de marzo de 1986, Ecuador vivió una rebelión militar liderada por el general Frank Vargas Pazzos, quien era el Comandante General de la Fuerza Aérea y Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. Esta revuelta estalló por las acusaciones de chanchullos en la compra de un avión Fokker por parte del gobierno de León Febres Cordero.

Vargas Pazzos se encerró en la base aérea de Manta con el apoyo de algunos oficiales y tropas. Lalo Calle, un fotógrafo de la revista Vistazo, estuvo allí y vio cómo Vargas Pazzos, en un acto desafiante, trazó una línea en el suelo y pidió a los militares que estuvieran de su lado que la cruzaran. En ese momento, un fotógrafo de prensa, Eloy Borya, también mostró su apoyo diciendo que estaba listo para cambiar su cámara por un fusil.

Aunque inicialmente hubo un acuerdo con el presidente Febres Cordero, la situación se complicó y Vargas Pazzos volvió a atrincherarse, esta vez en la base aérea de Quito. Esto llevó a la declaración del Estado de Emergencia, y finalmente el Ejército asaltó la base y arrestó a Vargas Pazzos.

Diez meses después, el 16 de enero de 1987, durante una visita del presidente Febres Cordero a la Base Aérea de Taura, un grupo de comandos leales a Vargas secuestraron al presidente, exigiendo la amnistía para el general encarcelado como condición para liberarlo.

Comentarios